MÓDULO 1: Desigualdades y violencia de genero
¿De qué hablamos?
Yo, ¿qué pienso
sobre esto?
Ver para creer
Y ahora ¿qué hacemos?
Para saber aún más
Cómo se entiende tradicionalmente el patriarcado
a través del sexo y el género
Tradicionalmente, nos hemos basado en el sistema sexo/género
para explicar las desigualdades entre hombres y mujeres.
El sexo,
referencia a los aspectos físicos
El genero,
construcción sociocultural,
de qué forma deberíamos ser y
comportarnos según sexo asignado
Además, según esas características aprendidas, la sociedad espera que nos comportemos de una u otra forma,
= estereotipos de género.
y con ellos se establecen los
= roles de género.
Donde
“Características masculinas”, socialmente asociadas a los hombres
(relacionadas con la dominación, el liderazgo, la valentía, etc.)
“Características femeninas” socialmente asociadas a las mujeres
(relacionadas con lo sentimental, la delicadeza, los cuidados, etc.)
Vienen impuestas por la cultura y sociedad,
siendo estos diferentes según el sitio y la época
Esta organización social crea una jerarquía,
en la que lo masculino es superior a lo femenino, y, por lo tanto,
los hombres ostentan más poder que las mujeres,
estando éstas últimas subordinadas.
Este orden social se llama patriarcado,
e impregna todas las culturas y sociedades.
Cómo lo ve la sociedad actualmente.
Actualmente, sabemos que, el género se aprende, no es natural,
por lo que puede cambiar o «desaprenderse».
De hecho, estos estereotipos y roles de género no siempre coinciden de una sociedad a otra y de un momento histórico a otro.
Los seres humanos deberíamos ser libres para elegir
qué hacer, qué gustos tener, cómo vestir,
cómo sentir, a quién querer,
independientemente del sexo que si nos haya asignado al nacer.
Con el sistema tradicional, en ningún lugar del mundo las mujeres tienen los mismos derechos que los hombres.
Hay que Romper, con las categorías sexo/género basadas en un sistema binarista.
Romper con el concepto de cisheteronormatividad (presupone que lo masculino y lo femenino son sustancialmente complementarios en lo que respecta al deseo. Esto quiere decir, que tanto las preferencias sexuales como los roles y las relaciones que se establecen entre los individuos dentro de la sociedad, deben darse en base al binario ‘masculino-femenino’, teniendo que coincidir siempre el ‘sexo biológico’ con la identidad de género y los deseos asignados socialmente a éste).
La máxima expresión de las desigualdades de género
derivadas del sistema patriarcal,
se da la violencia de género.
Según ONU (Naciones Unidas). Define la violencia de género:
Acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado
sufrimiento físico, sexual o psicológico.
La violencia contra las mujeres
es la violación de
derechos humanos más universal,
presente en todas
las sociedades del mundo.
La violencia de género puede dividirse según su tipología en:
violencia física, psicológica, sexual, económica y patrimonial, simbólica.
Física: La que se emplea contra el cuerpo de la mujer produciendo dolor, daño o riesgo de producirlo y cualquier otra forma de maltrato o agresión que afecte su integridad física. Puede causar daño visible o no.
Psicológica: Acto u omisión que daña la estabilidad psicológica o emocional de la mujer. El abuso emocional generalmente se presenta bajo las formas de maltrato verbal y daña la autoestima de la persona. Se manifiesta a través de:
• Amenazas verbales, coerción, intimidación, insultos, ofensas, gestos, gritos, humillaciones, etc.
• Desprecio, indiferencia y falta de atención.
• Negligencia y/o abandono.
• Acoso, privación de la libertad o privacidad. Aislamiento. Control y boicot de relaciones sociales.
• Comparaciones destructivas y/o difamación.
• Rechazo, discriminación por género.
• Enfado por incumplimiento de tareas consideradas propias de la mujer…
• Minimizar, culpar y negar el abuso
• Manipulación y abuso psicológico para llevar a cabo actividades no deseadas o dejar de realizar actividades deseadas. Minusvaloración sistemática de opiniones, valores y deseos.
Sexual: Acto que degrada o daña el cuerpo y la sexualidad de la mujer. La violencia sexual priva a la mujer de ejercer libremente su sexualidad. Algunos ejemplos, son:
• Presión para tener relaciones sexuales no deseadas.
• No usar ni permitir el uso de preservativos aun cuando ella lo pida.
• No realizar relaciones sexuales responsables, con riesgo de contagiarla con Infecciones de Transmisión Sexual (ITS).
• Obligarla a realizar o recibir tocamientos sexuales no deseados.
• Durante el acto sexual, obligar a la mujer a prácticas no pedidas ni deseadas.
• Obligarla a prostituirse o a tener relaciones sexuales con otras personas.
• Violación sexual, etc.
Económica y patrimonial: La que se dirige a ocasionar un deterioro en los recursos económicos o patrimoniales de la mujer; a través de la perturbación de la posesión, tenencia o propiedad de sus bienes, control del dinero y de las decisiones económicas, negar el derecho a trabajar, pérdida, sustracción, destrucción, retención o distracción indebida de objetos, instrumentos de trabajo, documentos personales, bienes, valores y derechos patrimoniales.
Simbólica: La que, a través de patrones estereotipados, mensajes, valores, íconos o signos transmita y reproduzca dominación, desigualdad y discriminación en las relaciones sociales, naturalizando la subordinación de la mujer en la sociedad.
- dentro de la familia y la pareja,
- en la comunidad,
- en las instituciones
- en el ámbito educativo y laboral…
Tanto es así que recientemente Luis Bonino, psicoterapeuta experto en género, acuñó el término “micromachismos” para definir las actitudes de dominación suave, formas y modos negados de abuso e imposición den la vida cotidiana. Son hábiles artes de dominio, comportamientos sutiles e insidiosos, reiterativos y casi invisibles, que se ejecutan permanentemente (por ejemplo, dar la cuenta para pagar a los hombres). Los micromachismos son la base de las demás formas de violencia de género.
La discriminación de las mujeres y la violencia de género es un problema que traspasa fronteras y que está presente en la mayor parte de los países del mundo. En todo el mundo, la violencia y la discriminación contra los derechos humanos de las mujeres comprometen severamente su salud sexual y reproductiva.
Las prácticas lesivas, incluyendo la mutilación genital femenina, la trata con fines de explotación sexual, la prostitución y los matrimonios forzados; dañan el bienestar físico, psicológico y social de las mujeres.
Somos el resultado de esta sociedad sexista y patriarcal que nos limita como personas. Para poder revertir esto, y que todo el mundo sea realmente libre de elegir cómo quiere ser, tenemos que intervenir con las niñas y mujeres, generando procesos de empoderamiento que permitan fortalecer sus capacidades y no ser símbolo de vulnerabilidad.
También es fundamental intervenir con los niños y hombres, apostando por la “desnaturalización” de los roles masculinos y por el cuestionamiento del modelo de masculinidad. Todo ello, para conseguir modelos relacionales más sanos y libres.
¿De qué hablamos?
Yo, ¿qué pienso sobre esto?
Ver para creer
Y ahora ¿qué hacemos?